Desde la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (FECOBA), a través de nuestra Mesa de Seguridad coordinada por Gustavo Grillo y co-coordinada por Emiliano Iglesias, bajo la órbita del presidente de la entidad, Fabián Xavier Castillo, creemos pertinente, dado el alto índice de robos de teléfonos celulares, difundir la información publicada por el Ministerio Público Fiscal de la Nación para proceder correctamente ante un caso de esta índole, preservando nuestra información y evitando que nuestro dispositivo sea utilizado en el mercado informal.
Lo primero que debemos hacer ante el robo o hurto del celular es, por un lado, realizar la denuncia en nuestra compañía proveedora del servicio y, por otro, acercarnos a una comisaría, fiscalía o juzgado, para también allí denunciar el hecho. Indistintamente de si el teléfono posee un contrato pre o post pago, es fundamental hacer la denuncia ya que de esta manera evitaremos que tras el robo, se cometan delitos con nuestro móvil.
Tomar medidas previas
Si fuésemos víctimas del hurto o robo del celular, al momento de realizar la denuncia ante la empresa proveedora, tendremos que tener conocimiento del IMEI del dispositivo. Este dato es de gran importancia, ya que el mismo nos será requerido por la compañía para bloquear el código e impedir que nuestro celular se reutilice en el mercado informal.
¿Qué es el IMEI?
El IMEI (en inglés, International Mobile Station Equipment Identity) es un código de 15 dígitos pregrabado por el fabricante para identificar cada equipo móvil a nivel mundial. Está compuesto por un código de identificación de marca y modelo otorgado a los fabricantes por la GSMA (Global System Mobile Association). El IMEI puede estar debajo de la batería, impreso en el equipo o plasmado en la caja original del teléfono. De no hallarlo, podemos llamar al *#06# desde nuestro celular. No obstante, en ambos casos necesitaremos el celular para averiguar el número y tomar nota del mismo. Así, ante el robo o hurto de nuestro equipo, contaremos con la información necesaria para que sea bloqueado correctamente por la compañía proveedora.
Otro canal habilitado para efectuar la denuncia es el *910, también realizando esta gestión el equipo será bloqueado y nadie más lo podrá usar (este llamado puede realizarse desde cualquier equipo).
Hoy en día, llevamos en nuestros dispositivos móviles una importante cantidad de información personal, desde datos de acceso a nuestras billeteras virtuales, hasta información vinculada a nuestro homebanking y, por ende, a nuestras tarjetas de débito y/o crédito. Por ello, es fundamental proceder correctamente, para que los delincuentes no tengan acceso a información sensible ni puedan utilizarla en su beneficio.
En el AMBA, según las estadísticas, se roban entre nueve y diez mil teléfonos por día. Antes de la pandemia, el negocio tenía que ver con las terminales, es decir con los aparatos físicos, pero hoy, la amenaza potencial no son los teléfonos en sí (que inmediatamente se revenden), sino las conexiones y habilitaciones de aquellas aplicaciones que utilizamos diariamente. Por ello, utilizar un pin de bloqueo en el equipo y bloquear la tarjeta SIM son otras de las sugerencias a considerar.
Para bloquear la tarjeta SIM, debemos ir ala opción ‘Seguridad’ de nuestro dispositivo y, dependiendo la marca del teléfono y de la versión del sistema operativo, tendremos la posibilidad de bloquear la SIM.
Hoy, custodiar con enorme responsabilidad individual el valor de nuestra privacidad es primordial, pero también lo es actuar con responsabilidad colectiva, ya que denunciando los hechos y evitando comprar dispositivos de dudosa procedencia estaremos desalentando el mercado ilegal de celulares. El robo del celular no sólo afecta a la víctima directa del hecho, sino que además promueve el mercado ilegal de compraventa de equipos.
